Pasada la tempestad, viene la calma, afirma la sabiduría popular, lo que para no variar se viene a aplicar una vez más, al mal habido huracán “Nate” que en realidad solo vino a espantar y activar medidas de precaución durante todo el fin de semana, que se prolongan hasta este lunes, sin que haya causado daños a los bienes o en la población.
Desde el viernes pasado, en la reunión del Consejo Estatal de Protección Civil efectuada en el puerto de Tuxpan, el gobernador Javier Duarte de Ochoa dio la voz de alarma, al anunciar que “como medida de precaución” se suspenderían las actividades en todo el sistema educativo veracruzano este lunes.
La medida –un tanto precipitada- pues todavía se tenía todo el fin de semana para evaluar el desarrollo del fenómeno, se tomó cuando “Nate” todavía se encontraba en el Golfo de México en calidad de tormenta tropical, pero se supone que tendría que tomar más fuerza para convertirse en un huracán destructor, lo cual afortunadamente nunca ocurrió.
Porque finalmente, luego de un recorrido errático, tocó tierra en las proximidades de Nautla, pero con mucha menor intensidad de lo esperado, incluso las imágenes captadas por los reporteros que se ubicaron en la región para cubrir el impacto muestran que había partes soleadas.
Algo que no se explica, es porqué si desde el viernes por la noche, se sabía que “Nate” no tenía la magnitud esperada como para ser un huracán pues tenía vientos máximos de 85 kilómemtros por hora, cuando que en realidad se trataba de una Tormenta tropical que es un ciclón bien organizado, de núcleo caliente, en el que el viento en máximo en superficie es de una intensidad de 63 a 117 km/h.
Pero desde el viernes a 10:45 horas se reportaba que: “Nate” se mantiene sin cambios en su intensidad, ha iniciado un lento movimiento hacia el Oeste a razón de 4 km/h, su centro se localizó a las 22:00 horas de hoy en 20.1°N y 93.2°W, aproximadamente a 450 km al Este-sureste de Tuxpan, Ver. y a 330 km al Este-noreste del puerto de Veracruz, Ver., con vientos máximos sostenidos de 85 km/h y rachas de 100 km/h. El pronóstico del Centro Nacional de Huracanes prevé que la tormenta tropical “Nate” se localice a las 07:00 horas de mañana sábado en 20.2°N y 93.8°W, aproximadamente a 335 km al Este de Tecolutla y aproximadamente a 275 Km al Noreste del puerto de Veracruz, con vientos máximos sostenidos de 85 Km/h y rachas de 100 Km/h.
El domingo por la mañana, a las 10:57 se reportaba que “El viento tenderá a debilitarse conforme el sistema avance en tierra, asimismo el oleaje en la costa tenderá a decrecer gradualmente”.
A las 12:00 el gobernador Javier Duarte twitteaba que “Hace unos instantes acaba de tocar tierra en territorio veracruzano #Nate con rachas de 95 km/hr, el punto exacto fue el municipio de Nautla. Se reportan lluvias en casi todo el territorio veracruzano, TODOS los ríos se encuentran por debajo de sus niveles críticos”.
Desde el viernes se sabía que “Nate” no era sino una Tormenta Tropical como las que afectan frecuentemente sin mayores consecuencias, sin embargo, se siguió con los preparativos como si se tratara de un Huracán, lo cual nunca ocurrió, pero en cambio se activaron albergues, las familias tuvieron que sacar sus pertenencias o llevarlas a sitios seguros de la inundación, se suspendieron actividades productivas, se suspendieron las clases en todo el estado, todo eso y más, ante la sicosis de que era inminente la llegada de un huracán, que en realidad era solo una tormenta tropical.
En la segunda reunión del Consejo Estatal de Protección Civil, la noche de este domingo, el mismísimo gobernador Javier Duarte de Ochoa, a manera de justificación, afirmó que “prefería ser tachado de exagerado, que de falto de precaución”.
Esta y otras publicaciones en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario
tu comentario es importante para el auditorio y para este espacio, opina libremente