¡¡¡Qué indignante!!!

Bien dicen que no hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague, y bueno aunque todavía no se va a pagar la deuda, el pasado jueves fue uno de esos plazos en que mayor expectación había, pues ya se nos iba a develar el secreto mejor guardado en la Nueva España, perdón, de Coahuila. Se nos iba a enterar a detalle el destino de los dineros que se obtuvieron con la tan llevada y traída multimillonaria deuda, de la cual hasta el Gobernador con licencia, Humberto Moreira, ya se dice indignado. Pero que creen, en lugar de aclarar los números, nos montaron un circo que el mismísimo Circo de Moscú, estaría envidioso. No solo no dieron las cifras detalladas, armaron un show mediático que acabó de enredar los números. El cinismo es tal, que hasta dijeron que gracias a la deuda habían adelantado el desarrollo del estado 20 años, ¡qué barbaridad! Ahora a través de una muy costosa campaña de publicidad nos dicen que “Hoy Coahuila es otro”, si pero más pobre, más vapuleado, más lastimado, más señalado. Incluso periódicos como el “El País” de España, ya nos mencionan.

El tema ha unificado a articulistas y analistas de las diversas corrientes políticas, la condena es unánime, por más que las autoridades quieran decir que es un tema electoral, incluso “personajes” del mismo partido que los indiciados, en corto se avergüenzan de lo sucedido.

Claro que el PRI tiene que salir a defender a su Presidente de la nueva generación, pues esta situación le puede complicar su camino a los Pinos.

El lado positivo de esta situación es que finalmente los laguneros estamos abandonando el conformismo, la sociedad está empezando despertar y a unirse reclamando y exigiendo buen gobierno y sobre todo cuentas claras, bueno hasta les platico, que este hecho ya llega a tal extremo que grupos rivales como el Consejo Lagunero de la Iniciativa Privada, CLIP, y el Grupo Empresarial Lagunero, GEL, ya unieron voces reclamando el asunto.

No podemos permanecer indiferentes, de por si el escenario político y financiero mundial está muy difícil, como para permitir situaciones de este tipo, la sociedad si tiene derecho a estar indignada y no comparte este derecho con los responsables.

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