Benito Jiménez / Enviado Reforma
Veracruz, México (2 octubre 2011).- Las últimas tres balaceras reportadas en el estado, que han provocado el cierre de escuelas, así como los 35 cuerpos arrojados en Boca del Río el 20 de septiembre, tienen a los veracruzanos en vilo.
Don Armando, de 60 años, advierte que en la próxima balacera le va a dar un infarto.
Ya vivió la que asegura será la peor de su vida. El 27 de marzo, marinos y presuntos sicarios se enfrentaron afuera de su casa por casi 30 minutos.
"Era la guerra, las paredes y los vidrios cimbraron de tanto plomo", recuerda el ex trabajador de la Aduana de Veracruz.
"Aproximadamente a las 3:15, cuando un convoy circulaba por avenida La Fragua, entre las calles de Mario Remes e Isabel la Católica, se detectó a un vehículo Bora blanco con hombres armados, por lo que con ademanes se les indicó el alto", dice el reporte de la Tercera Zona Naval al Cuartel General de la Marina, cuya copia posee Grupo REFORMA.
Sin embargo, los presuntos sicarios, en vez de detenerse, dispararon en contra de los elementos de la Armada e hirieron a tres.
Durante la persecución, el Bora pasó de un lado a otro de esa calle que tiene camellón y terminó por chocar con otro vehículo.
"En su intento de huida, los agresores no dejaron de disparar", refiere el reporte naval.
Los marinos repelieron la agresión y en la refriega murió un delincuente. Otro, fue detenido.
De acuerdo con el reporte, los sicarios portaban uniformes con siglas de la AFI y poseían además 90 sistemas ponchallantas, uniformes tipo OTAN, así como fusiles de alto calibre y una Uzi 9 milímetros
Cuando Don Armando pensó que todo terminaba, una camioneta Jeep Patriot color negro arribó con más delincuentes para apoyar a sus compañeros del Bora.
La calle de La Fragua fue escenario de otra tanda de metralla.
Desde la camioneta negra salieron cientos de disparos contra los marinos, quienes se agazaparon en autos y paredes mientras recargaban sus armas.
"Una vez que cesó el fuego se procedió a un reconocimiento y se encontró la Jeep Patriot abandonada por sus ocupantes en Delfino Valenzuela, entre América e Isabel la Católica con las puertas abiertas", añade el comandante naval en el reporte.
"Ni la casa es segura, todos los vecinos cambiamos vidrios. Se oía el rompedero de cosas, gritos desesperados, esto ya no es vivir, es vivir con miedo. Todos vivimos con miedo", añadió el sexagenario.
Fuentes navales indicaron que en el combate al crimen organizado, tan solo en Veracruz, de 2009 a la fecha han muerto 17 marinos por enfrentamiento, 10 por ejecución y dos por agresión, como el ocurrido en la calle de La Fragua, cerca del estadio de futbol Luis "Pirata" Fuente.
En Boca del Río, marinos y elementos de la Policía Estatal efectuaron ayer diversos patrullajes de vigilancia.
Los despliegues comprendieron la Plaza de las Américas, cerca de donde fueron arrojados 35 cadáveres el 20 de septiembre.
"Cuando pasan (los marinos o policías) no sabes si esconderte o sentirte seguro, no sabes en que momento se puede desatar una balacera, pues los del crimen nomás los andan cazando para darles", opinó el encargado de una cafetería, que luce sin clientes.
Guarda Gobernador silencio en Twitter
El Gobernador de Veracruz, Javier Duarte, optó por frenar sus tweets luego de la polémica que generaron sus dichos en torno a los 35 muertos arrojados en Boca del Río.
El último mensaje por esa red social lo escribió el 21 de septiembre: "Aquí la violencia ahora se le relaciona con el combate al crimen y no a la actividad criminal, se acabaron las extorsiones eso nadie lo dice", reprochó.
El mismo día, horas después de la masacre, anotó que era lamentable el asesinato de 35 personas, pero más que esas mismas víctimas decidieran dedicarse a extorsionar, secuestrar y matar.
"Es aberrante e indignante, repudio lo q ocurrió ayer (20 de septiembre); sin embargo, el mensaje es muy claro, en Veracruz no hay cabida para la delincuencia", indicó en otro texto.
Los mensajes ocasionaron una serie de ataques por suponer antecedentes delincuenciales de las víctimas sin antes investigar.
Incluso, el 22 de septiembre, el coordinador del tricolor en el Senado, Manlio Fabio Beltrones, criticó a Duarte por minimizar la ejecución de 35 personas en Boca del Río.
La vocera del Gobierno estatal, Gina Domínguez, aseguró el viernes en medios electrónicos que las pesquisas de esos crímenes son confidenciales. Lo aclaró a 10 días de que el Gobernador ya había revelado que eran miembros del crimen organizado.
Al final, solicitó a la PGR tomar las riendas de las indagatorias.
Los tweets del Gobierno estatal son enviados por la oficina particular de Duarte, que encabeza Juan Manuel del Castillo. En sus textos promueve los programas estatales.
La vocera hace lo propio en su cuenta en Twitter. "El gobierno de Javier Duarte decidido a sacar adelante a Veracruz; hay trabajo, decisión y sobre todo, voluntad política", escribió Domínguez.
Y aunque Duarte tuiteó en julio que las redes sociales son un excelente medio para comunicase, nomás ya no tuitea.
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