El congal postapocalíptico
Jorge Hill
“¿Terrorismo? pues algo grave habrán hecho” dirás tú si es que no estás enterado del asunto. Lo que hicieron @gilius_22 y @Maruchibravo fue tuitear rumores de violencia en Veracruz, única y exclusivamente. Estos rumores, como los cientos más que aparecieron en cientos de cuentas más y en llamadas telefónicas preocupadas, hicieron que padres de familia fueran preocupados a recoger a sus hijos a las escuelas, ya que entre tantos rumores habían varios de bombas en primarias. La situación no le gustó nada a Javier Duarte, gobernador priista (surprise, surprise…) de Veracruz y escribió que:
Sea preocupación auténtica por parte de los twitteros, sea tal vez actuar a raíz de la misma histeria colectiva, no sabemos, lo que sí sabemos es que estas personas, por hacer lo que probablemente tú hagas a diario, tuitear, hoy corren el riesgo de perder su libertad.
En la opinión menos grave, estas personas twittearonirresponsablemente. ¿Cómo se twittea responsable o irresponsablemente? ¿Cuáles son los límites? y ¿realmente es aplicable el término? ¿Por qué se está tratando a personas que hacen el ejercicio diario y constitucionalmente protegido de libre expresión como si fueran criminales sociópatas con el poder de mover masas?
“Soy tuitero y estás bajo mi control, ahora sentirás
terror, mucho terror, ¡terror de terrorismo!
Hay quienes afirman que se ha procedido conforme a la ley y de manera justa al momento que las autoridades dieron con “la fuente” de los falsos rumores que causaron terror en la población. El mentado artículo 311 ya tan citado, que se puede ver en el auto de formal prisión, contiene diversas frases ambiguas, que bien lo podrían hacer poderoso y muy peligroso, como el anillito de Frodo, en las manos equivocadas:
“A quien utilizando explosivos, sustancias tóxicas, armas de fuego o por incendio, inundación o por cualquier otro medio realice actos en contra de las personas, las cosas o servicios al público, que produzcan alarma, temor, terror en la población o en un grupo o sector de ella, para perturbar la paz pública o tratar de menoscabar la autoridad del Estado o presionar a ésta para que tome una determinación, se le impondrán de tres a 30 años de prisión, multa hasta de 750 días de salario y suspensión de derechos políticos hasta por cinco años.”
“A quien, conociendo las actividades de un terrorista y su identidad, no lo haga saber a las autoridades se le impondrán de uno a nueve años de prisión y multa hasta de 150 días de salario”.
Muy bien, veamos cuántos “terroristas” se me ocurren en 1 minuto:
1) Harold Camping, quien hizo que medio mundo cristiano/crédulo entrara en pánico por un supuesto fin del mundo que no llegó hace un par de meses.
2) Jaime Maussán quien cada vez que un cometa o asteroide va a pasar a millones de kilómetros de la tierra hace la insinuación de que nos va a cargar la chingada a todos. También dice que hay extraterrestres buenos y malos, y los malos pues obvio nos quieren matar, invadir o comer o no sé… alguna mamarrachada de esas que dice ese brodi.
3) Casi todos los padres católicos y cristianos que dicen que ya quieren echarnos a su dios vengativo porque ya estamos muy loquitos y muy irrespetuosos y ya viene el apuercalípsis now.
4) La Biblia como documento terrorista por contener la profecía del apocalípsis y convencer a millones de mexicanos de tal idiotez.
5) PETA y Greenpeace con sus campañas de “consciencia”
Personas Por El Tratamiento Ético de los Animales y
el tratamiento fascista a los humanos.
6) El 90% de los tuiteros, el otro 10% son bots.
7) La prensa amarillista… bueno, la prensa y noticieros mainstream, y las televisoras y …. y… y…
… ahm pues ¿Todo mundo?
Lo que vemos hoy es algo sin precedentes, pero que se viene avisando en el mundo desde hace meses, tal vez años. El que no está enterado que las redes sociales han sido herramientas indispensables en movimientos sociales masivos y que han logrado resultados como en los países árabes es porque está ciego o ha tenido la cabeza metida en el trasero desde el 2000. No es ya ningún secreto que las redes sociales están siendo una auténtica patada en las pelotas para los regímenes autoritarios, para los añejos sistemas corporativos y de copyright, para los poderes que quieren seguir apañando y apilando dinero, derechos ajenos y a veces hasta vidas. Están los movimientos de indignados en España, los hartos de las deudas del país aventadas al individuo en Grecia e Inglaterra, los chinos asqueados de la censura y el control autoritario que pisotea derechos humanos básicos, los de San Francisco contra BART y la lista no sólo sigue y sigue, crece y crece.
Cada vez que se quiere arrestar una idea, arrestando a un individuo,
bajan las acciones de NyanCat, el niño Dios llora en el cielo y
teh intahrwebz pierde 30 lulz.
¿A dónde nos va a llevar la interpretación de la ley y los abusos de poder que permite? ¿Hasta cuándo la siguiente generación enterada en realidad de lo que es internet y cómo funciona va a sustituir a los dinosaurios informáticos de la política actual? ¿Cuánto tiempo falta para que escritos como este y millones más que dan una simple opinión sean considerados “terrorismo” “agitación de masas” “sabotaje al estado”? ¿Algún día se cumplirá el sueño de la teoría política donde el gobierno es únicamente un representante de los ciudadanos y está a su servicio en vez de responder cada vez que es criticado como un padre celoso y punitivo, que toma chivos expiatorios para intimidar a los demás “hijos”? ¿Hasta cuándo va a seguir la locura por parte de los gobiernos para intentar regular internet y las redes sociales, que no es otra cosa que intentar callar las voces de sus ciudadanos menos amansados y más despiertillos?
Si de terror se trata yo estoy aterrorizado de algunos miembros del poder y de algunas instituciones corruptas y añejas del gobierno, estoy aterrorizado de la mentalidad común de que aquel que critica y expone con intención de mejorar cultura, estado y gobierno debe ser un rebelde, traidor a la patria y debe ser castigado. Tengo miedo de tantas cosas y personas de este país, ya que bajo el término “terrorista”hoy a toda incomodidad e incómodo se puede castigar , me valgo de la tendencia entonces, me les uno, pues, y acuso a esas cosas y personas de mi país de “terrorismo psicológico” contra mí y toda la población ¿Quiénes se van a ir a la cárcel?
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